jueves, 21 de agosto de 2014

Llegó la edad

Se produjo una brecha en la rutina,
un fallo de seguridad en la monotonía,
y un esquivo sentimiento ha surgido,
de no se sabe donde,pero es pasado.

Amenaza con quedarse a dormir,
enturbia el pensamiento, lo distrae,
merma las ansias de ilusión ,y dice:
dejarte llevar, sigue jugando.

Hierbe la sangre, con sólo un roce,
el deshielo ha llegado y se agradece.
El rumbo se tornó indefinido,
el viento sopló desde los cuatro cardinales.

Y el tiempo transcurrido, se aprovecha.
La juventud desgastada de su mirada,
incisiva, perdida en ocasiones,pero verde,
ilumina los recovecos de un alma turbia.

Y, en esta historia de incierto fin,
sentir,rozar piel,enrojecer pezones,
sentir pasiones cubiertas de indiferencia
se trata de vivir,aunque sea a trompicones.
Pero sobre todo bombear sangre y sentir.

Y, se siente si se pierde, o si se gana,
pero sonríes al pensar en lo sentido,
de medio lado, con pícara mirada,
porque apostaste ,ganases o perdieses.